Llegó a jugar un partido del Mundial de 1934, ante Italia, sustituyendo a Ricardo Zamora, que se había lesionado. Formó parte de la plantilla del Barcelona que ganó la primera edición de la liga española (1928-29). Jugó en total 225 partidos con la camiseta azulgrana y fue el primer presidente del sindicato de futbolistas españoles. Tras retirarse como jugador en activo, inició una carrera en los banquillos que le llevó, entre otros, al club azulgrana, Español o Sporting.