En la Liga española y Segunda División, los jugadores del primer equipo (máximo 25 jugadores, incluyendo un máximo de tres porteros) deben usar un número entre 1 y 25 y utilizar el mismo número durante toda la temporada. A partir de mediados de 1997, antes del inicio del Torneo Apertura, en Argentina se comenzó a usar números fijos que durarían toda la temporada. España, al igual que la gran mayoría de los equipos nacionales europeos, no aceptó la invitación para jugar el Mundial debido al enfado por considerar inapropiado que el primer gran torneo se disputase fuera de Europa y, más en concreto, fuera de Inglaterra, al ser esta la cuna de este deporte.